Por mucho tiempo fue una de mis revistas favoritas y de la noche a la mañana no entedia porque habia cambiado tanto. Fue hasta hace poco que una amiga hizo unas pinturas para aquella revista cuando me di cuenta que Véronique ya no trabaja ahi.
"Después de la expropiación de la cual fuimos víctimas, buscamos como respetables inmigrantes o forzados nómadas, un suelo propicio para establecernos y perpetuar nuestros oficios de editores, fotógrafos, investigadores y diseñadores. En fin, compulsivos de la palabra y de la imagen, dejando a los postizos el mal uso de la palabra picnic. Con cierta decepción, no agradecemos a nuestros supuestos defensores o los que hablaban de una revancha periodística, al ver el muy previsible pero no menos triste resultado de un picnic sin comensal ni sustancia. Se fueron de vacacionistas, dejándonos pasar por muertos. Un tiempo últimos de la fila, ahora estamos de regreso en la pantalla. Quizá no tendrán los amantes de los impresos, el gusto de encontrarnos en librería, pero sólo serían quimeras de papel, por las inevitables cuestiones económicas sujetas a la aparentemente indestructible ecuación: time is money. Lo digital tiene la ventaja de ser menos opresor."
Véronique Ricardoni
Revista PANIC
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